Vivimos actualmente en una era donde la inteligencia artificial crece a pasos agigantados, haciendo más facil labores que hace unos años eran realizadas únicamente por nosotros. Basta con ver noticias acerca del desarrollo de automóviles autónomos, de algoritmos que pueden ayudar a descubrir enfermedades con mayor rapidez, e incluso tiendas inteligentes que prescinden de empleados, para darnos cuenta del impacto que puede tener en nuestras vidas.
Es por eso que surge la pregunta ¿En algún momento seremos reemplazados por esta? o ¿cuáles son los límites de la inteligencia artificial?
Pero, como todo en esta vida, dar respuesta a estas interrogantes no es tan simple. A continuación veamos algunos casos que nos ayudarán a tener un mejor entendimiento de este tema tan complejo.
Amazon Go, la tienda “sin trabajadores”
Imagina entrar a una tienda donde escojas los productos que necesites y, sin necesidad de pasar por caja a pagar estos, simplemente salgas por la puerta. De esto se trata la moderna tienda física de Amazon que funciona con inteligencia artificial.
Basta con tener la aplicacion móvil de Amazon Go, una cuenta de Amazon (y vivir en Estados Unidos) para poder ingresar a una de sus tiendas. Haciendo uso de un scaner de códigos QR en su entrada y de una serie de cámaras a lo largo de la tienda, somos analizados por algoritmos que se encargan de identificar los productos que vamos tomando y devolviendo a los estantes, con la finalidad de añadirlo a nuestro “carrito de compras” virtual.
Una vez que cruzamos la puerta de salida, automáticamente se carga en nuestra cuenta de Amazon el costo total de los productos que nos hemos llevado.
Esto es logrado gracias a la visión computarizada que permite interpretar las imágenes que se van recibiendo y a que, con el uso de machine learning, cada persona es identificada con un patrón que es seguido por toda la tienda.
A pesar de que no existen cajas, si se encuentran trabajadores en esta tienda, los cuales están encargados de la orientación a los consumidores, devolución de productos así como también reposición de las estanterías.
Si es que esta tendencia empieza a crecer a lo largo del mundo, lo cual es probable, muchas personas tendrían que evaluar la posibilidad de otro tipo de empleo.
Un algoritmo que interpreta Rayos X
¿Es posible que una aplicación permita interpretar resultados de rayos X de una manera más rápida y acertada que los médicos? Un grupo de investigadores de Stanford desarrollaron un algoritmo que permite entrenar un modelo a través de una gran muestra de (más de 100 000) tomas frontales de tórax con la finalidad de detectar patrones de enfermedades presentes.
Una vez estos patrones fueron analizados y aprendidos por el algoritmo, es posible, usando el modelo desarrollado, detectar casos de neumonía analizando tomas de Rayos X. Luego, comparándola con los resultados de otros radiólogos, se determinó que el modelo de inteligencia artificial supera en precisión al promedio de los radiólogos involucrados.
Se espera que este tipo de automatización pueda mejorar los servicios de salud que se ofrecen y sea un aliado de los médicos a la hora de tomar decisiones para un correcto diagnóstico de enfermedades y el tratamiendo de estas.
Puedes encontrar el paper en este enlace.
El auge de los asistentes personales
Si ya viste la película Her, protagonizada por Joaquin Phoenix (si, el que actualmente interpreta The Joker de manera magistral), te darás cuenta que la realidad no se encuentra tan alejada de la ficción.
Con el lanzamiento de los asistentes personales de Google y Amazon (Google Assistant y Alexa respectivamente) cada vez se nos hace más facil prescindir de tareas que podrían ser automatizadas por estos. Acciones tales como programar un temporizador, agregar una actividad a tu calendario, reproducir música en algún dispositivo conectado e incluso encontrar una receta para cocinar son realizadas tan solo mediante un comando de voz.
He de reconocer que en el 2018 adquirí un Google Home Mini y quedé fascinado por las funcionalidades que ofrece. Si bien no es un asistente tan complejo como Jarvis (el cual probablemente sea desarrollado en un futuro cercano), el uso que se le puede dar nos otorga una herramienta útil que, sin el desarrollo de la inteligencia artificial, no sería posible.
Sin embargo cabe preguntarnos, ¿estamos siendo escuchados constantemente por estos dispositivos?
De acuerdo a Bloomberg, se ha descubierto que trabajadores de Amazon escuchan grabaciones de voz de usuarios de Alexa con la finalidad de un mejor entendimiento del habla humana para dar mejores respuestas entrenando sus algoritmos de software. Pero el problema radica en que estas estarían siendo grabadas sin activar el dispositivo mediante el comando de voz, indicando que somos escuchados en todo momento.
Amazon indica que los datos íntimos de cada persona, como su nombre o dirección, no son enviados. A pesar de ello, estos se encuentran conectados a un número de cuenta.
Esto nos lleva al siguiente punto.
La ética y moral en un mundo de Inteligencia Artificial
En la serie de Netflix Black Mirror, serie que recomiendo mucho, se nos presenta un capítulo donde todas las personas se rigen por un sistema de puntajes, las cuales pueden acceder a servicios con mayor facilidad si es que éstas tienen un puntaje alto y, de la misma forma, son prohibidos de ellas si es que no cumplen con un puntaje mínimo. (El capítulo en cuestión se llama Nosedive)
Ahora, ¿que pensarías si te digo que esto ya se encuentra en funcionamiento?, específicamente en China.
Este país tiene como misión ser potencia mundial en inteligencia artificial para el año 2030. Actualmente cuenta con un sistema de vigilancia total que a través de infinidad de cámaras y sistemas de reconocimiento facial, es capaz de reconocer a sus ciudadanos en todo momento y evaluar su comportamiento, con la finalidad de así reducir delitos y otras actividades que afecten el orden público.
Pero, deberíamos comenzar a cuestionarnos si es ético tener a toda una población vigilada para evitar que se cometan actos delictivos, e incluso tener vigilados a miembros que se opongan al régimen autoritario amedrentando así su libertad de expresión mediante técnicas de represión indirectas.
En un mundo donde los biólogos se unieron en contra del desarrollo de armas biológicas, pero los físicos fracasaron dando lugar a la creación de armas de destrucción masiva que siguen siendo almacenadas por países como Rusia y Estados Unidos, es labor de las personas involucradas en inteligencia artificial el establecer los límites y marcos de referencia para el desarrollo de tecnologías que nos sirvan de aliadas para la consecución de nuestros objetivos.
Como hemos podido ver, el tema de inteligencia artificial no es ni blanco ni negro, tiene matices que nos indican que si bien existen riesgos al desarrollarlos cada vez más, estos harán nuestra vida mucho más simple.
Si el artículo te interesó, puedes ver este documental de DW en donde se ahonda más en el tema.
¿Cuál es tu punto de vista al respecto, estamos preparados para un mundo de inteligencia artificial? Deja tu respuesta en la sección de comentarios.